La verdad poco o nada sabia de esta cinta hasta que llegó la polémica por los diálogos en una de sus actrices, la famosa cantante Selena Gómez y su actuación hablando en un español con un acento muy deficiente al común hablado (Méxicano). Es más, por este hecho pensé que ella era la protagonista de la cinta, pero luego de entender de que trataba el film me parecía difícil que lo fuera. Pero ojo, antes que nada y para los que no son fans de los musicales esta no es su película ya que, si bien por si sola la historia es suficiente para mantener nuestra atención, este recurso es ocupado, pero a diferencia de La La Land (2016) acá la historia es más cruda de fondo y este elemento musical contrasta demasiado en algunas escenas.
Como sinopsis la historia trata de como la abogada Rita Mora Castro (Zoe Saldaña) tras una talentosa carrera profesional ya comienza a cuestionar su actuar de cómo sus conocimientos jurídicos son usados para sobreseer el crimen de sus defendidos que en muchas ocasiones son culpables de graves delitos. Un día recibe una misteriosa llamada en la cual se le informa de manera violenta que tiene que ayudar a un jefe de uno de los carteles más importantes de México Juan “Manitas” del Monte (Karla Sofía Gascón) en convertirse en uno de los sueños que siempre tuvo de niño, que es convertirse en una mujer.

Con esta historia llena de contrastes el film desde el comienzo nos deja claro cómo va ir desarrollándose especialmente con el elemento musical, pero algo que me llamó la atención es que si bien la película es hablada en español cuenta en todo momento con subtítulos en este mismo idioma, eso me confundió mucho pensando que el idioma base seria el inglés pero para mi sorpresa no, la mayoría del film y la canciones son habladas en “español” y este punto si es difícil olvidar la controversia inicial, y para mi pésame es difícil omitir este punto (más si el idioma nativo del espectador es el español) y es que la cinta cuenta con un acento extraño que en ocasiones poco o nada empatizaremos con él, esto ya pone un muro entre el espectador y como se desarrolla la historia, si no es por los diálogos de la actriz Karla Sofía Gascón, quien interpreta a Emilia Pérez, hubiésemos querido que mejor se omitiera este idioma. En este punto y hablando de Emilia Pérez, la actuación de Gascón es sobresaliente y quizás uno de los puntos que más destaco, nos hace recordar a interpretaciones de las mejores cintas de Almodóvar y se nota el compromiso con el guion.

Lamentablemente esta cinta de producción francesa-mexicana cae en pecados que son difíciles de perdonar, en especial en como retrata de manera muy somera temas actuales y que afectan a muchas personas como es el narcotráfico y la violencia. En algunos momentos confunde esta romantización de la vida de estos carteles, en especial por el dinero e influencia en las elites más poderosas. Otro punto es que las razones por la cual Juan ”Manitas” del Monte se quiere convertir en mujer no queda del todo claro y es tomado de manera muy superficial al igual que el tema anterior, quizás haber tenido una visión más introspectiva de este personaje hubiese ayudado a empatizar más con su historia.
En conclusión, Emilia Pérez llega como una cinta que no estará exenta de polémicas, con una historia que, si bien posee buenas intenciones, estas se pierden en la superficialidad con que es tocado temas delicados y que son de connotación actual. La trama navega entre el drama y la comedia siendo ningún elemento lo realmente claro como para sumergirnos en una historia que pone a la redención y las segundas oportunidades como su tema principal.