Es válido reconocer que “revivir” una saga del pasado es un deseo culposo de todo quien se considere un geek en estos tiempos, mas donde la nostalgia nos acompaña día a día. Pero qué ocurre cuando se vuelve a dar vida a una saga de la cual pareciera finalizó completamente, y agregar a esto que incluso sus creadores originales por años señalaron que no se permitirán una nueva entrega. Termina el año 2021 y tenemos el “amargo” agrado de recibir la nueva cinta (continuación directa) de la original saga Matrix (1997), denominada The Matrix Resurrections, ya el subtítulo “Resurrections” nos hace recordar anteriores sagas que vieron la luz luego de una imposible continuación -tratar de recordar Alien: Resurrection (1997)- al parecer utilizar dicho término ya despierta nuestros temores de que se puede forzar continuar una historia si los recursos económicos lo permiten. También esta entrega nos permite reflexionar que algunas historias debieron quedarse como fueron creadas y concluidas originalmente.
Guion complicado y aburrido
La primera película de Matrix (1997) entregó elementos que para su tiempo fueron revolucionarios, principalmente fue innovador acercar toda esa propuesta filosófica de la percepción de la realidad en un mundo en donde todo pareciera ser artificial, esto sumado a una gran dosis de acción y personajes que parecieran directamente sacados de los mejores comics o novelas gráficas. Al parecer dicha mezcla fue un rotundo éxito, pero fue inconsistente al momento de realizar sus continuaciones, que sin embargo mantuvieron un tono y calidad respetable. Lamentablemente, The Matrix Resurrections intenta presentar una historia que trata de llevar al espectador a una serie de emociones y sorpresas que en conjunto parecen simplemente incompresibles. Esto sumado a una película que se hace difícil de digerir por su larga extensión, dos horas y medias que la verdad se sienten, y en donde en momentos como espectador llama a desconectarse o hacer una pausa. Esta fórmula de presentar muchos antecedentes y entregar respuestas al confuso regreso de sus personajes puede resultar comprensible para los fans mas acérrimos de la saga , sin embargo, la película no se logra convencer a ella misma, y se limita a mostranos directamente escenas de películas del pasado (sí, directamente escenas de las anteriores películas) para justificar y familiarizar al espectador con los sucesos presentados.
Pobre calidad técnica y efectos especiales
Sin duda el aspecto técnico fue uno de los que más destacó en la primera película, siendo pionera en presentar una serie de avances tecnológicos al cine y también otras industrias como videojuegos, sin embargo, acá no vemos nada de eso, es más nos confirma que cada día que pasa este aspecto es más dejado de lado en las nuevas cintas de acción, en donde ya al ojo entrenado por el paso del tiempo y el constante uso de los mismo efectos computacionales, nos damos cuenta el mal uso de técnicas digitales para presentar no solo la acción si no también paisajes. Ya son casi 20 años del comienzo de la saga, es impresentable ver como se manejó este aspecto comparándose inclusive con sus anteriores entregas. Es más, ya en los videojuegos actuales nos pueden visualizar momentos de acción mas inmersivos como lo hace la película. También resaltar el pobre uso del elenco y lo sobreactuado de algunas escenas, acá no podría limitar esta crítica a solo uno de los actores, porque la verdad todos los personajes se ven muy caricaturizados y en algunos casos desganados de estar en la cinta.
Conclusión
The Matrix Resurrections llega a expandir la saga y presentar nuevos acontecimientos y dar respuesta a los sucesos posteriores de sus anteriores. Sin embargo, no logra conectar con la historia que intenta presentar, usando recursos que hasta ahora, parecen un poco forzados como lo es introducir escenas directamente de las anteriores películas. Una pobre ejecución y un elenco que no logra convencer hacen que la película caiga en “arenas movedizas” en donde al intentar salir solo logra caer mucho más a la profundidad. Quizás hubiese funcionado como una serie de televisión o haber retomado una idea de precuela o spin-off de personajes, sin embargo, como producto único no puede defenderse por sí misma y es solo apta para los seguidores de la primera, que pueden también encontrarse perdidos ante un guion desganado y enredado.