Es difícil sentarse a ver esta película sin tener como antecedente a su director Robert Eggers, uno de los directores más atrevidos de los últimos años en donde su sello al parecer es crear escenarios crudos y escenas sacadas del mismo infierno de Dante. Este toque único lo ha llevado a sus obras más reconocidas como The Witch (2015), The Lighthouse (2019) y The Northman (2022) todas ellas con un estilo único en su filmografía y haciendo uso de una fotografía que resalta lo difícil de la vida en la naturaleza y como esta es una dificultad para la vida humana cuando las condiciones no son aptas para ello. Con este currículum no podemos ser indiferentes a sus proyectos por lo cual una vez anunciada su próxima película Nosferatu ya podíamos imaginarnos que esta historia iba contar con el sello de Eggers en su filmografía, y para nuestro agrado lo sigue manteniendo, aunque acá si vemos que pudo abarcar otras áreas de su mente creativa que en algunos puntos resulta y en otros queda una pequeña duda.
Como sinopsis Nosferatu cuenta la historia de Thomas Hutter (Nicholas Hoult) en su periplo por hacer su trabajo que consiste en poder vender una finca que es de dominio del Conde Orlok (Bill Skarsgård) tras este encuentro se van desmarañando una serie de horribles secretos que están unidos a extrañas visiones que poseen algunas mujeres bellas del pueblo en donde viven, la llamada ciudad de Wisborg. Bajo estas visiones se incluye a la joven y hermosa esposa de Thomas de nombre Ellen (Lily-Rose Depp).
La historia puede parecer simple y la verdad es un punto que no llega a mejorar durante la cinta, pero lo que si se tiende a resaltar es lo escabroso de las escenas y como estas son mostradas con una fotografía y audio que a más de uno le hará difícil permanecer tranquilo en la sala de cine. Acá se puede definir esta película como un ensayo del horror clásico bajo un aura ambiental gótico que no nos dará descanso durante todo el film. Por lo cual puede parecer un punto que a muchos espectadores les podrá agradar y a otros no, puedo recordar cintas como Poltergeist (1982) son de estas películas de horror que nos tiene todo el tiempo nervioso en donde la historia pasa a un segundo plano y solo nos quedamos con escenas difícil de procesar y que permanecerán en nuestra retina (en algunos casos) toda la vida. Con esto no quiero decir que la historia sea de una mala película, solo que el elemento del terror esta resaltado al punto de tener jump scare que de verdad nos dejarán incomodo (y que de hecho no son pocos). Un elemento positivo que posee la película es todos los elementos visuales que utiliza para contar la historia, siendo esto ya solo un punto para poder ver Nosferatu siendo toda esta fotografía gótica y arquitectura victoriana sea llevada a un nivel muy alto, esto también se aplica al vestuario usado con los actores que hacen que toda esta historia se haga más creíble. Todo esto acompañado de un gran elenco que si bien no resalta por partes individuales si se percibe el gran compromiso con la cinta.
En conclusión, Nosferatu entrega a Robert Eggers el título de uno de los directores mas atrevidos y creativos en la filmografía actual. En una historia que podemos apreciar se ve perfeccionada casi todos los elementos vistos en sus anteriores filmes en donde el concepto del terror y horror es llevado a límites insospechados. Todo esto acompañado de un apartado visual y acústico deslumbrante, lamentablemente la historia no llega a resaltar como los anteriores puntos por lo cual no consigue ser una película que pueda agradar a todos los espectadores. El uso de jump scare y un audio de constante angustia puede provocar que sea una experiencia difícil de presenciar si no estamos preparados para ello.