El 2020 ha sido el año mas esperado por las amantes de los doramas, porque dos grandes estrellas harían su retorno a la pantalla chica. El primero, y del que ya hablamos anteriormente en una super producción, es Lee Min-ho, quien hizo un increíble vuelta con The King: Eternal Monarch. Pero otro de los más amados de los oppas coreanos es, el inigualable, Kim Soo-hyun. Un actor que nunca me ha gustado (ahhahaha) pero cuyos doramas son increíblemente famosos y halagados. Y este sin duda, no es la excepción. Y hay muchas razones para ellos.
It´s Ok to not be OK es otra de las maravillas que Netflix ha producido este año. Como siempre, de la mano de los mágicos de Studio Dragon, este drama se centra en un Centro Psiquiátrico llamado OK, donde podemos encontrar una variedad de personajes, cada uno con su propia historia, pero siempre centrándose en los 3 principales. Moon Gang-tae, Moon Sang-tae y Ko Moon-young.
Gang-tae y Sang-tae son dos hermanos, el primero ha sido enfermero en múltiples clínicas psiquiátricas y el segundo, el hermano mayor, un talentoso ilustrador que padece trastorno del espectro autista. Por otro lado, Moon-young es una famosa escritora de cuentos infantiles, cuyos libros no reflejan el típico final feliz de cuentos de hadas, sino que se encargan de entregarle moralejas relacionadas al mundo real a los niños y de como es la vida incluso ya de adultos. Pero el destino de los 3 cambia radicalmente al momento de encontrarse. Sang-tae, gran admirador de la autora, quiere conocerla y deciden ir a una firma de libros, donde finalmente, después de un altercado con otro admirador, sus destinos se cruzan de forma inesperada.
Sin embargo, debido a un trauma que tiene Sang-tae de adolescente, cuando vio morir a su madre a manos de una “mariposa”, los hermanos deben huir constantemente, pues, cuando se acerca la fecha en la que ocurrió este hecho, aquella mariposa vuelve persiguiendo a Sang-tae en sueños, por lo que nunca están más de un año en un mismo lugar. De esta forma es que llegan la clínica OK, y es aquí donde se desencadenan todos los acontecimientos de esta increíble novela Coreana.
A decir verdad, es un dorama fuerte desde un principio. Toca temas de salud mental tan profundos y cercanos a uno, que te demuestra que nadie esta ajeno a ello. No hay dudas, toca cada fibra de tu interior, porque más de alguna situación te representa de formas insospechadas. Hace tiempo que los doramas me habían quitado las lágrimas, pero los de Netflix las están devolviendo, y de este dorama lloré unos 13 capítulos de los 16 que tiene en total.
Pero hay algo que destacar incluso mas sobre la historia central. Y son dos actuaciones muy especiales (una más que la otra, pero solo por el hecho de que su personaje tiene mayor protagonista que el otro) que son los intérpretes de Moon Sang-tae. Dos personas que interpretaron a este personaje, uno de adolescente y el otro de adulto, cuyas actuaciones sin lugar a dudas fueron las mejores. Dos actores que supieron darle vida a una persona con trastorno del espectro autista de forma tan detallada, qué si no fuera porque los conoces de otros doramas, realmente creerías que viven con este trastorno.
Este dorama deja con la boca abierta a quien lo vea. Si buscas romance, olvídate de él. Este drama habla y se enfoca en lo que es la familia, e indica la importancia de la familia que uno escoge, de esa familia que no es de sangre y como esta influye completamente en tu vida, como te ayuda a salir adelante, como te motiva a seguir adelante cuando todo se derrumba y también, que siempre estará ahí sin importar lo que pase. Es un drama coreano totalmente distinto a lo que conocemos, y es por eso que vale la pena cada minuto de él. Y por eso se merece cada uno de los 5 cafés que le daré y no hay duda que deben verlo ya. No se van a arrepentir.
